24 de junio de 2022
El triunfo histórico en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Colombia de sus candidatos Gustavo Petro y Francia Márquez Mina nos llena de regocijo y esperanza. Tras dos siglos y un poco más de años en los que las dos corrientes oligárquicas principales en dicho país estuvieron en el control del poder político, se abre ahora un nuevo horizonte. En él una propuesta de gobierno predicado en la justicia social, la protección de los recursos naturales y el medioambiente, la seguridad social y la lucha contra la corrupción marcará la diferencia.
En conjunto, el binomio Petro-Francia obtuvo 11,281,013 votos (50.44%) frente al binomio de la derecha Hernández-Castillo con 10,580,412 (47.31%).
El agrupamiento político por el cual compitió Gustavo Petro se denominó Coalición Pacto Histórico, frente a la agrupación por la cual compitió Rodolfo Hernández, Liga de los Gobernantes Anticorrupción. El resultado de la primera vuelta electoral había dado a Petro un 40.32% de los votos, mientras que a Hernández le había producido el 28.15% de los votos. Inicialmente, como resultado de las declaraciones del candidato de la derecha uribista, Federico Gutiérrez de la Coalición Equipo por Colombia, quien obtuvo el 23.91% de los votos endosando a Hernández, se pensó que la sumatoria de votos entre el segundo y tercer candidato superaría en una segunda vuelta el número de los votos obtenidos por Petro en la primera vuelta. Sin embargo, el resultado final no fue así.
La coalición de organizaciones políticas de izquierda y centro izquierda que apoyaron la candidatura de Gustavo Petro incluyen: Colombia Humana, Unión Patriótica, Partido Comunista, Polo Democrático Alternativo, Movimiento Alternativo Indígena y Social y Todos Somos Colombia. Estas organizaciones se nuclearon a través de un programa que atendió los temas generales de la Seguridad y el Conflicto interno, la Economía, la Educación, la Salud, los Derechos Humanos, el Medio Ambiente, la Corrupción y la Política Internacional. Sobre el particular, el periodista y escritor Franklin Ledezma Candanedo, en su escrito titulado Triunfo Histórico de Gustavo Petro y Francia Márquez Mina, presidente y vicepresidenta electos en Colombia, desmenuza lo que estima son las propuestas más relevantes del programa político presentado por Petro al electorado colombiano de la siguiente manera:
(A) Seguridad y Conflicto: (1) Reforma progresiva de las fuerzas armadas con miras a poner fin al conflicto armado en Colombia; (2) Terminación del Servicio Militar Obligatorio; (3) Reubicación de la Policía Nacional bajo el Ministerio del Interior o Justicia; (4) Desmontar el Escuadrón Anti disturbios; (5) Políticas de protección a líderes sociales; (6) Instaurar la justicia restaurativa y convertir las cárceles en lugares de resocialización; (7) Recursos destinados a la reparación de víctimas; (8) Acelerar los procesos de restauración de tierras; (9) Eliminar la dependencia macroeconómica del Estado en rentas de la cocaína; (10) Eliminar la dependencia de la población rural de los capitales de la cocaína mediante la sustitución; (11) Investigar los usos benéficos que puedan tener los productos derivados del cannabis y la hoja de coca; y (12) Desmantelar de manera pacífica los grupos multicrimen, identificando sus financiadores, estructuras y vinculación con el Estado.
(B) Economía: (1) Proporcionar empleo con un salario básico a quienes no pueden encontrar trabajo como complemento al empleo privado; (2) Formalizar la propiedad y evitar la colonización en terrenos baldíos; (3) Desincentiva el latifundio improductivo en tierras fértiles incentivando a los propietarios a activar la producción, pagar los impuestos o venderlos al Estado; (4) Activar la reforma agraria establecida en el Acuerdo Final de Paz; (5) Aranceles inteligentes a bienes e insumos agroalimentarios y agroindustriales; (6) Desarrollo de una industria nacional de fertilizantes, proteger y fomentar las semillas nativas; (7) Transición de Colombia del carbón y el petróleo a energías renovables; (8) Desarrollar modos de transporte férreo y fluvial, así como la construcción de nuevas vías terciarias; (9) Garantizar ingreso mínimo por encima de la línea de pobreza; (10) Bono pensional equivalente a medio salario mínimo para adultos mayores que no tienen derecho a pensión; (11) Cotizaciones obligatorias de los trabajadores a los sistemas de pensiones; (12) Plan de choque contra el hambre mediante asistencia alimentaria; (13) Desmontar gradualmente beneficios tributarios que distorsionan la competencia.
(C) Educación: (1) Acceso universal y gratuito a la atención integral de la primera infancia (0 a 6 años); (2) Garantizar el acceso y permanencia en el sistema educativo a través de la búsqueda activa de la población desescolarizada; (3) Garantizar el transporte, apoyo a familias y extensión de la jornada educativa; (4) Garantizar el acceso de jóvenes a la educación pública, gratuita y de calidad a nivel tecnológico y universitario; (5) Liberar de deudas a todos los usuarios de préstamos educativos.
(D) Salud: (1) Establecer un sistema único, público y universal que no dependa de la capacidad de pago; (2) Financiar el sistema con impuestos progresivos y cotizaciones equitativas; (3) Enfocarse en la salud preventiva e intercultural; (4) Crear Consejos Territoriales de Salud que sean la base para establecer redes de salud con enfoque territorial; (5) Garantizar acceso a medicamentos esenciales, fomentando la reindustrialización del sector farmacéutico; (6) Impulsar una agenda internacional para hacer efectivas las flexibilidades sobre los derechos de propiedad intelectual sobre medicamentos; (7) Adelantar un plan nacional de prevención del embarazo adolescente; (8) Brindar acceso efectivo y diferencial a métodos anticonceptivos y procedimientos claves para una higiene menstrual digna; (9) Acatar la decisión de la Corte Constitucional a despenalizar el aborto.
(E) Derechos Humanos: (1) Las mujeres ocuparán al menos el 50% de todos los cargos públicos en todos los niveles y ramas del poder; (2) Crear un Ministerio de la Igualdad; (3) Integrar a las mujeres que trabajan en cuidados en el hogar al sistema pensional; (4) Desarrollar un plan integral contra el feminicidio; (5) Reglamentar al curul raizal en el Congreso, apoyo y protección a los pueblos palanqueros y rrom; (5) Ampliar los territorios colectivos de comunidades afro descendientes y los territorios indígenas; (6) Garantizar los derechos a la diversidad de género y orientación sexual LGBTIQ; (7) Reconocer la unión de parejas del mismo sexo y sus derechos a la adopción y seguridad social; (8) Apoyo médico y psicosexual para el tránsito de género con protocolos explícitos y participación de la población trans; (9) Garantizar las condiciones para el ejercicio de la igualdad y la libertad de culto.
(F) Medio Ambiente: (1) Reducción gradual en la escala del modelo de extracción; (2) Prohibir la exploración de yacimientos no convencionales y detener proyectos pilotos de “fracking”; (3) Acelerar las energías renovables (eólica y solar); (4) Estimular la implementación de proyectos de hidrógeno; (5) No otorgar nuevas licencias para la exploración de hidrocarburos ni gran minería de cielo abierto: (6) Destinar al consumo interno las reservas actuales de combustibles fósiles; (7) Financiar proyectos de energía limpia por parte de pequeños productores y cooperativas; (8) Transición progresiva de los transportes de carga y pasajeros del diésel a modos férreos y energías limpias; (9) Exigir de las empresas mineras la rehabilitación de las áreas intervenidas y la descontaminación de los ríos; (10) Proteger los páramos y cuencas abastecedoras de los ríos; (11) Control ambiental de las cuencas hidrográficas destinadas a la generación de energía y proyectos mineros; (12) Promover un frente americano de lucha contra el cambio climático, incluyendo el rescate de la selva amazónica; (13) Separar las funciones de gestión ambiental y autoridad; (14) Darle a las autoridades indígenas y de comunidades afro descendientes autoridad ambiental en sus territorios; (15) Transformar áreas de conflictos por usos de suelo en zonas forestales, agrícolas, agroecológicas y agrosilvopastoriles; (16) Prohibir el uso de sustancias tóxicas de alto impacto, incluyendo asperjar con glisofato; y (17) Garantizar la protección de personas y colectivos que defienden los derechos ambientales.
(G) Corrupción: (1) Asegurar un mayor nivel de participación de la ciudadanía en las decisiones públicas e impulsar presupuestos participativos; (2) Fortalecer la vigilancia efectiva a toda contratación pública: (3) Reforma a la Procuraduría y la Controlaría; (4) Reformar el sistema de elección al Congreso; (5) Legislación para la protección del denunciante de corrupción; (6) Prohibición a quienes reciban fondos públicos que participen en paraísos fiscales; (7) Suprimir las nóminas paralelas e impulsar la carrera administrativa.
(H) Política Internacional: (1) Renegociar Tratados de Libre Comercio; (2) Impulsar el comercio exterior, los circuitos de producción internas y regional y la defensa de la soberanía alimentaria; (3) Promover un frente americano contra el Cambio Climático y el rescate de la selva amazónica; (4) Cumplimiento de los acuerdos alcanzados en las cumbres climáticas; (5) Respeto al orden internacional y no intervención en asuntos internos de otros países; (6) Garantizar los derechos de la población migrante sin xenofobia ni discriminación; (7) Pasar el financiamiento destinado a la guerra anti drogas al apoyo a políticas y programas de transformación económica en las regiones afectadas.
Es muy probable que, a pesar de las intenciones de Petro llevar adelante su programa, tropiece con los obstáculos que presente la política injerencista de los Estados Unidos sobre Colombia y América Latina. De un lado están las siete instalaciones militares que Estados Unidos opera sobre suelo colombiano y el Plan Colombia; de otro lado, el contra balance que para los Estados Unidos representa Colombia frente a la Revolución Bolivariana.
Un reciente artículo escrito por Javier Calderón Castillo el 15 de junio de 2022 y publicado el 20 de junio de 2022 en ALAI-amlatina señala que los intereses de los Estados Unidos en Colombia se basan en varios temas: Venezuela, la paz, la guerra contra las drogas y la debilidad institucional de Colombia para enfrentar un escenario regional.” El autor considera que “Colombia es hoy un aliado más complicado y volátil que en el pasado”, aunque también señala que para los Estados Unidos tal aliado sigue siendo controlable.
Señala Calderón Castillo que la asistencia militar de los Estados Unidos a Colombia pasó de $203.9 millones en 2017 a $471.3 millones en 2022; que cerca de 110 mil soldados han sido entrenados a través del Plan Colombia entre 1999 y 2018; que en 2022 Colombia invirtió aproximadamente $11 mil millones en gastos de defensa pasando a ser el cuatro país que más invierte en el presupuesto militar en América, luego de Estados Unidos, Canadá y Brasil siendo precisamente los Estados Unidos el principal país en venta de armas a Colombia. El autor nos indica:
“La “injerencia militar de los EE UU en Colombia continuará, y sus fuerzas militares formadas y entrenadas durante el Plan Colombia estarán desplegándose por todo el continente como extensión de las intenciones de control expresadas por el Comando Sur, ahora justificada con la asociación de Colombia a la OTAN. La famosa e inútil guerra contra las drogas seguirá siendo la excusa ‘legal’ (aunque cada vez menos legítima) para que el gobierno/sector privado estadounidense garantice su presencia y contribuya con el clima propicio para el bienestar de las derechas colombianas, sea en boca de los improperios de Trump o de la mano de Joe Biden.”
Columnas
- La elección del Donald Trump
- Resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas de 2024 condenando el Bloqueo a Cuba
- Las elecciones presidenciales en Uruguay: el Frente Amplio se enfrenta al Partido Nacional en una segunda vuelta
- La XVI Cumbre del BRICS realizada en la Federación de Rusia
- El “Conflicto” y el “Cambio”: retos y transformaciones de lucha ante la ofensiva neoliberal del capital