La actualización de la guerra de Israel contra Hamás, el uso de nuevas tecnologías en la guerra y el peligro de la regionalización del conflicto

5 de abril de 2024

Las noticias sobre el desarrollo de la operación militar genocida de Israel en la Franja de Gaza nos sigue impactando. Mientras nos conmueve el ataque perpetrado por Israel mediante el uso de drones contra los vehículos donde se desplazaban diez trabajadores  humanitarios de la organización World Central Kitchen, el presidente Joseph Biden autorizaba un nuevo paquete de ayuda militar al gobierno de Israel.

Los datos revelados  hasta ahora indican que el ataque a los tres vehículos de World Central Kitchen en los cuales viajaban los diez empleados de la organización se encontraban separados en un radio de 12 millas de distancia unos con relación a otros. Tras la suspensión de dos comandantes israelíes participantes en el bombardeo a los trabajadores que prestaban ayuda humanitaria, ha salido a relucir que se trató de una operación intencional, dirigida a impactar cada uno de los vehículos, utilizando drones de alta precisión.

El Secretario General de las Naciones Unidas ha calificado como “inaceptable” el ataque. Igual respuesta ha dado el presidente estadounidense, a pesar de añadir de paso, que niega que Israel esté violando el derecho internacional

La insensibilidad de la Administración Biden se evidencia aún más en el hecho de que, mientras se aprueba este paquete de ayuda militar a Israel, que incluye 25 aviones de combate F-35, la cantidad de 1,800 bombas MK-84 de 900 kilos, capaz de destruir una sola de ellas manzanas de residencias con un solo impacto y 500 bombas MK-82 de 225 kilos, Israel culmina su operativo militar contra el hospital Al -Shifa. Éste hospital, posiblemente la última instalación en operaciones de esta naturaleza en Gaza, cobró la vida de más de 400 palestinos y destruyendo más de 1,000 viviendas a su alrededor.

Mientras se desarrolla esta operación militar de Israel en la región sur de la Franja de Gaza, el periódico israelí Haaretz, denunciaba que el gobierno de Israel había establecido en Palestina las llamadas “zonas de exterminio”. En ellas el personal militar de las Fuerzas de Defensa de Israel está autorizado a eliminar físicamente a cualquier persona palestina que ingrese a dichas zonas, principalmente hombres adultos.

Así lo acreditó un video publicado por la página electrónica de Al Jazeera. En ella muestra soldados israelíes asesinando cuatro palestinos desarmados mientras caminaban sobre las ruinas de Jan Yunis. Indica la página electrónica que, entrevistado uno de los soldados israelíes, este había indicado que los palestinos “no habían puesto en peligro a las fuerzas armadas israelíes.”

Pero si causa pavor la situación, más horripilante es la información que surge del escrito publicado por el periódico británico The Guardian escrito por Bethan McKernan y Harry Davis, titulado La máquina lo hizo fríamente: Israel utilizó IA para identificar 37,000 objetivos Hamas.

Entre los datos reseñados que más destacan en dicho escrito se señala:

1. En la campaña de bombardeos del ejército israelí en Gaza se ha utilizado una base de datos impulsada por IA no revelada anteriormente. Indica que en un momento identificó 37,000 objetivos potenciales en función de sus aparentes vínculos con Hamas, según fuentes de inteligencia involucrada en la guerra.

1. El sistema de inteligencia artificial denominado “Lavander”, permitió que gran número de palestinos muriera durante las primeras semanas de la ofensiva israelí, e incluso antes de iniciar la misma. Se trata de un sistema que utiliza distintas fuentes de referencia utilizando Inteligencia Artificial para identificar personas que serían objeto de ataque en operaciones militares.

1. El uso de este sistema “Lavander” levanta cuestionamientos “legales y morales…transformando la relación entre el personal militar y la máquinas.”

1. El sistema “Lavander” ha sido desarrollado por una división élite de las Fuerzas de Defensa de Israel, la Unidad 8200, similar a lo que en Estados Unidos es la Agencia de Seguridad Nacional.

1. Ya semanas antes de los sucesos del 7 de octubre de 2023, se habían llevado a cabo ataques que permitían la muerte de al menos 15 a 20 personas en el proceso de intentar eliminar una persona de bajo perfil relacionado con Hamas. Para ello se utilizaron municiones conocidas como “dumb bombs”, capaces de destruir una residencia con sus ocupantes. Señala que desde  semanas antes del 7 de octubre de 2023, este modelo de identificar objetivos humanos se había acelerado dramáticamente con un 90% de precisión.

1. Las personas objeto de estos ataques formaban parte de más de 36,000 personas identificadas por “Lavander”, lo que permite explicar al alto número de palestinos muertos en este período desde el 7 de octubre de 2023 al presente, en el cual ya la cifra sobrepasa el número de 32 mil muertos. Indica que conforme a las Naciones Unidas, en el primer mes de la guerra, 1,340 familias sufrieron múltiples pérdidas, contándose en 312 las familias que perdieron más de 10 miembros.

1. Estimados de la inteligencia israelí señalan que el ala militar de Hamas la integran entre 25-30 mil militantes. Para Israel, este  método de bombardear las residencias de personas vinculadas con Hamas procurando su eliminación física, aunque en el proceso se elimine una familia entera, es un método que según ellos les facilita las cosas. La inteligencia israelí ha llegado a estimar el número de muertes dependiendo si se trata de un comandante de brigada o comandante de un batallón.

1. En la primera semana de la guerra, indica la publicación, Israel autorizó el uso de la IA para atacar militantes de bajo relieve en situaciones en que murieran 15 personas civiles no combatientes, aunque también autorizó situaciones en las que murieran 20 personas.

1. Expertos en Derecho Internacional Humanitario han expresado alarma a esta situación ya que deja sin efecto la protección que debe darse a civiles no combatientes en escenarios de conflictos armados.

En los pasados días, decenas de miles de israelíes han tomado las calles en repudio al gobierno de Benjamín Netanyahu y la continuación de la guerra contra Gaza. Durante las protestas, se ha desatado la represión contra los manifestantes. Una de las manifestantes ante el Parlamento israelí, de nombre Mamma Mol expresó lo siguiente:

“Hace seis meses  que estamos librando una guerra y la estamos perdiendo. Y yo creo que la única manera de ganar esta guerra es mediante elecciones, que la gente tenga la oportunidad de volver a elegir a los gobernantes, y traer a los rehenes a casa, y traer los soldados a casa. Y por eso estoy aquí.”

La expresión de esta ciudadana israelí recoge el sentir de amplios sectores de la población en Israel. A diferencia de la percepción que tiene mucha gente en Puerto Rico, que piensa en Israel y los que allí profesan la fe judía constituyen un sector esencialmente monolítico, la realidad es que ni Israel ni su población lo es.

Cierto es que hoy la extrema derecha dirige en coalición su gobierno; cierto también es que la mayoría de los ciudadanos de Israel aman su país y están dispuestos a defenderlo; pero  también no menos cierto es que la inmensa mayoría de la población israelí rechaza el nivel de violencia desatado por el gobierno contra la población palestina y albergan la esperanza de poner fin a un conflicto que ya lleva demasiado tiempo sin una solución, Por esto, la propuesta de dos Estados, como lo concibió las Naciones Unidas a finales de la década de 1940, o como se ha planteado más adelante de dos Estados a partir de lo que eran las fronteras antes de la Guerra de 1967, no deja de ser un punto de partida en la búsqueda de una solución. No por algo, el nivel de aceptación de la coalición que encabeza Netanyahu está en su nivel más bajo.

El empeño del actual gobierno de Israel de regionalizar el conflicto, con sus operaciones contra la República Islámica de Irán, violentando principios de Derecho Internacional, donde ha procedido a desatar ataques como el perpetrado en los pasados días contra el Consulado de Irán y su Embajada en Siria, augura mayores complicaciones. Después de todo, el ataque a la embajada de un país es equivalente al ataque al territorio nacional de dicho país. En ese sentido, el ataque al consulado iraní y la muerte de importantes representantes de dicho país, raya en una declaración de guerra de Israel contra Irán. Como ya ha adelantado funcionarios del gobierno de Irán, la venganza será la respuesta de parte de la República Islámica de Irán.

Este criterio, según la página electrónica Sputnik, citando al Asesor de Comunicaciones de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirbi, ha creado en la Administración Biden la preocupación “por una posible guerra a gran escala entre Israel e Irán tras el ataque a una instalación diplomático iraní en Damasco.” No olvidemos que en el operativo fallecieron los generales Mohamed Reza Zahedi y Mohamad Haidi Rahimi, asesores de alto rango del Ejército iraní pertenecientes al Cuerpo de Guardianes de la Revolución. Ya antes, en 2020, bajo la administración de Donald Trump, el general Qasem Soleimani e integrantes de su escolta habían sido asesinados en Bagdad.

Se indica que en los días siguientes a la incursión aérea de Israel, dejando muertos 10 personas entre combatientes iraníes sirios y un libanés perteneciente a Hezbola, la República Islámica de Irán ha iniciado la movilización por tierra de múltiples camiones portando misiles balísticos hacia Iraq y Siria.

Un conflicto de mayor escala entre Irán e Israel indudablemente arrastraría de alguna manera a Estados Unidos. Recordemos que desde el inicio de la guerra de Israel contra Hamas, Estados Unidos ha posicionado frente a las costas de Israel dos grupos de combate con dos portaviones y sus respectivas dotaciones aéreas, dos barcos anfibios con dos batallones de infantería de marina y helicópteros de combate, naves de apoyo, fragatas, destructores y submarinos nucleares, todos ellos con capacidad para transportar y utilizar misiles de largo alcance, incluyendo armamento nuclear táctico. Posiblemente, anticipando este tipo de escenario, se da el último paquete de ayuda militar a Israel incluyendo los aviones F-35, como los utilizados en el ataque al consulado y embajada iraní en Siria.

Si el conflicto se regionalizara, sus efectos podrían también impactar en Líbano a las milicias pro iraníes de Hezbola y ciertamente, a Siria. La relación a lo largo de los años del gobierno constitucional de Bashar al-Assad con la Federación Rusa y los intereses de esta última en la región, también es un componente importante en el análisis de la situación en el Medio Oriente.

De acuerdo con  Sputnik, la posibilidad de una “guerra frontal” con Israel no estaría en el panorama ante la realidad, como ha indicado el expresidente estadounidense, Jimmy Carter, de que Israel tiene en su arsenal clandestino 300 bombas nucleares. En tal sentido, los movimientos militares de Irán serían asimétricos, con otro tipo de represalias “mediante drones y misiles cruceros
o ataques a embajadas de Israel”.

Se indica, también la regionalización del conflicto  tendría como respuesta, incrementos en el precio del petróleo, cuyo disparo sería un “golpe letal a la candidatura de Joseph Biden”.

A juicio nuestro, el apoyo de Estados Unidos a Israel no cambiará, aunque sí podría haber un cambio de apoyo eventual a Netanyahu y su gobierno. De ahí la propuesta que ya a nivel interno  se ha producido en Israel donde se reclaman elecciones para el mes de septiembre de 2024.

Ya veremos en los próximos días a dónde nos conduce esta nueva etapa del conflicto.